
Abriendo paso hacia el Valle de Ara y Ordesa se encuentra esta bella localidad, a 974 metros de altitud. Conserva el sabor tradicional de los típicos pueblos de montaña. En sus cercanías se encuentra la ermita de San Bartolomé, de finales del siglo X, que constituye uno de los principales ejemplos del arte serrablés.
Fiestas y ferias:
Fiesta de San Guillermo: 11 de febrero
Fiesta de San Bartolomé: 24 de agosto
Servicios:
Pista polideportiva
Frontón
Piscina pública
Centro social
Parque infantil
Establecimientos privados de restauración y hostelería